Los activistas dicen que les tiraron palos en El Aaiún

Piden a la ONU que actúe para evitar una masacre

Silvia Mesa: "El vicecónsul de Marruecos iba en el barco con un grupo de apoyo"

02:00 VOTE ESTA NOTICIA

Los ocho activistas, ayer, vitoreados por un grupo pro saharaui nada más tomar tierra en el puerto de La Luz. i MARRERO

NOTICIAS RELACIONADAS

Llegan al Puerto de La Luz los activistas canarios retenidos. Canarias

JAVIER BOLAÑOS
"En el barco iban 31 personas acompañando al vicecónsul de Marruecos en Canarias a las que se les distribuyeron a su llegada ropa típica saharaui, bocadillos, banderas marroquíes y la foto del rey [Mohamed VI] para que rápidamente se manifestaran en contra nuestra".

Así lo afirmó Silvia Mesa, una de los ocho activistas canarios en defensa del pueblo saharaui que ayer llegó al puerto de Las Palmas a bordo del Volcán de Tejeda, de Naviera Armas, tras ser expulsados de Marruecos. Y pidió la mediación de las Naciones Unidas para evitar una masacre después que se impidiera desembarcar al grupo con palos y lanzamiento de latas.

Los activistas pidieron ayer, tras arribar a Gran Canaria, la intervención inmediata de Naciones Unidas en defensa de los saharauis que llevan cerca de tres semanas en un campamento próximo a El Aaiún. Silvia Mesa afirmó que la respuesta internacional de Naciones Unidas "es necesaria y precisa", ya que temen "que se cometa una masacre" con las personas que permanecen acampadas en la zona.

El colectivo expulsado aseguró que los manifestantes que les esperaban fuera del barco les lanzaron latas y palos y que fueron instigados por la propia policía. Además, añadieron que altos cargos de la policía marroquí les sacaron fotos y vídeos dentro del barco, mientras les pedían la documentación, y que, ante esta actitud, ellos respondieron haciendo lo mismo.
Silvia Mesa expuso ayer que los extranjeros que querían entras en el Sahara tenían obligatoriamente que portar la bandera marroquí.

Además, criticó que una española, que nada tenía que ver con esta protesta, tuviera que ser hospitalizada por un ataque de ansiedad tras confundirla con la mujer que sufrió múltiples lesiones en agosto durante una manifestación

Mientras, la población saharaui comienza a vivir una situación crítica. La falta de condiciones higiénicas y medicamentos y la escasez de agua en el campamento de Gdeim Izik, a la afueras de El Aaiún, está pasando ya factura, según informó una de las personas que permanecen en el campamento, que dejó claro que mantendrán la protesta "hasta el final". Esta fuente negó que se hayan instalado jaimas en la zona, como asegura Marruecos.